Muestra de que la República existió en España, es el Atheneo de Madrid, donde la clase popular era expectadora de tertulias encendidas, discusiones subidas de tono, duelos de guante blanco, sobre una taza de café, en una mesa de mármol blanco salpicado por máculas de café, nacieron discursos incendiarios, artículos para la discordia, peleas entre escritores, y también dieron a luz grandes obras de la literatura .....junto con grandes citas de amores clandestinos.

Perdida entre sus salas pude asistir a recitales de poetas de renombre actual, una biblioteca de ensueño, y una sala para tertulias actuales, que hoy día parecen no tener mucho sentido, parece que ya no hay tanto que decir, o que no hay mucha gente dispuesta a pagar con su sangre (40 eurazos al mes) ser socio del ateneo de Madrid, que parece mentira que naciese con esa idea de llegar la cultura al pueblo.

Es un viaje en el tiempo. SIN DUDA.

MADRID


Eres inacabado por eterno,
No hay Madrid quién te posea,
Piel de estrella fugaz,
Que vas y vienes,
Alimentas con posibilidades
Recorres el cuerpo de un escalofrío,
Te veo de forma completa y circular
Te veo no a pequeñas partes,
Sino en concepto, en locura,
De tenerte,
De que me invades,
Y yo me dejo……

Mueres por tu profundo sueño,
Nadie te conoce, infinito
Eres que matas y renaces,
Eres tan nuevo que adormeces,
En las aguas que no fueron,
En los grises días ásperos,
En los falsos soles secos que te llegan,
Te pierdes ciudad ya sin tus límites,
Te abarcas hasta la locura,
Y te quedas a la orilla del río en que naciste.

Rebeca Figueroa.