Manifiesto contrapoético para salvar la poesía.
- Lo único que no se puede poetizar es la poesía.
- Una vez que eliminamos los tópicos establecidos en torno a la poesía, lo que queda es la poesía pura. Si es que existe, la poesía pura es algo que pasa todo el rato.
- Si somos capaces de poetizar un segundo cualquiera, tendremos la poesía, al alcance de todas las manos por diferentes que sean, y esto no es ninguna metáfora.
- A veces hay que inventar palabras. Estamos en nuestro derecho, y quizás es nuestro deber.
- A veces hay que eliminar palabras que dan vueltas alrededor de lo que realmente importa. Esto es lo que diferencia la poesía contemporánea, de la poesía anterior (aunque no siempre).
- La poesía no es un arma cargada de futuro, la poesía no es un arma, un arma no es poético. Aunque nos guste Mucho Miguel Hernández. La poesía no es algo dorado en nubes de mármol con velas a los pies. El poeta no es, no puede ser una divinidad, que no anda por las calles, no es un genio con musas sobrevolándole.
- La poesía no es rima. Ni todo lo que rima es verdad.
- Ni siquiera la poesía es verdad.
- Hace mucho que poesía se escribe así: ¿poesía?
- Hay piedras más poéticas. Parapatéticas. Para-poéticas.
- El poeta es un sinvergüenza, que de pequeño era un niño tímido. A veces la falta de vergÜenza es un sentimiento sublime(o umblime, más por el ombligo). Cómo las cosas que nunca dirías en público.
- La palabra sueño, sólo se puede usar para decir "tengo mucho sueño".
- La poesía se hace necesaria a medida que deconstruimos el término legado por los ancestros. La poesía hace compañía, pero no más que una persona. A todos nos hace falta compañía.
- La poesía está rota, y eso es bueno.
1 comentario:
¿Por qué siempre me consigues emocionar...? ¿Hasta cuando estás en Madrid? Un beso enorme....
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